¿ANTOLOGÍA MARCIANA?

2050km. de palabras
(Antología de relatos vasco-canaria)
VV. AA.
Baile del sol, 2008.
|340 p.|25€|ISBN:9788496687707|

¿Una antología de relatos de autores vascos y canarios? ¿Por qué? ¿Con qué objeto? ¿No se aprestará alguien a decir que ya no hay qué no inventen? ¿Cuál es el nexo entre estos autores canarios y vascos para merecer ser reunidos en un mismo volumen y, lo más importante, que al lector le importe, le interese, y adquiera el libro por ser una antología de autores vascos y canarios, y no por otro cosa? ¿No es este un volumen de dos antologías, separadas, realizadas por dos antólogos independientes, Agustín Díaz Pacheco y Oscar Alonso Álvarez, reunidas en un mismo volumen con el objeto de que los vascos lean a los canarios y los canarios a los vascos, trascendiendo sus pequeños territorios, conquistando exangüemente otros?
Como autor incluido en la parte canaria del asunto, me presto a reseñar el libro aquí por dos razones. La primera es la indudable calidad de alguno de los relatos. Por ejemplo el de Alicia Llarena, que acierta a tratar el tema de la inmigración desde África a Canarias de un modo completamente oblicuo, yéndose lejos, dando un rodeo para regresar con algunas consideraciones éticas y morales de gran utilidad para un lector insular, que sin embargo subrayan sutilmente precisamente aquello que hay de universal en el fenómeno: el clasismo, si no el racismo, que lo impregna todo. También el cuento del jovencísimo Eduardo Delgado Montelongo, una historia futbolera cargada de misterio, buena escritura en concordancia con el objetivo de montar una sugerente fábula. Y por poner un ejemplo de los vascos (muchos de ellos autores con suficiente obra y acreedores de importantes premios, como el Tiflos o el Lengua de Trapo, entre otros tantos), destacar el buen cuento de José Javier Abasolo, dominador del género negro, con humor e intriga y sensación de interés hasta el final.
La segunda de las razones es el carácter “comparativo” del volumen, que se deriva de juntar marcianamente en una edición a autores de dos comunidades autónomas tan distantes de nuestro país. Porque si alguien pudiera pensar que descubriríamos en este libro dos literaturas con al menos notables rasgos diferenciadores, no es así en absoluto. Y el seleccionador de los autores vascos, Óscar Alonso Álvarez, lo apunta expresamente: “Los autores aquí seleccionados comparten dos notas comunes: su pasión por el relato y su expresión en lengua castellana. (…) Las distancias geográficas entre un grupo de autores y otro, no aportan un punto de vista existencial marcadamente diferente (…) Si alguien pretende apreciar diferencias regionales inherentes, achacables a esta distancia sólo estará haciendo un ejercicio estéril de lucubración”. Pues eso.
Esto lo escribimos precisamente en un espacio que hemos creado varios autores españoles (uno canario, yo, otro granadino, Ernesto Pérez Zúñiga, y otros dos venezolanos, Juan Carlos Méndez Guédez y Juan Carlos Chirinos) con el título de La Mancha Literaria y bajo la convicción de que todos compartimos un mismo espacio, el de la literatura escrita en español. Apuntaba Juan Carlos Chirinos en su conferencia dictada en Ámsterdam y publicada en el número anterior de La Mancha –una conferencia que me parece espectacular y que les recomiendo vivamente, “La frontera líquida”—, que las fronteras de la literatura en español son eso, líquidas, y recordaba las palabras de Úslar Pietri, donde refería que todos nosotros, escritores en español, pertenecemos a un único reino: el reino de Cervantes. Vascos, canarios, andaluces, colombianos, venezolanos, argentinos, mexicanos, bolivianos… Lo otro, como bien apunta Óscar Alonso Álvarez, es buscarle los tres pies al gato.
El resto de autores incluidos en la antología son: Sergio Arrieta, Txema García Nieto, Javier Maura, Alejandro J. Oviedo, Fernando Palazuelos, Verónica Portell, Txami Rodríguez, Pedro Ugarte, José Luis Urrutia (por los vascos), y Paula Nogales, Cristina R. Court, Antolín Dávila, Víctor Ramírez, José Manuel Hernández, Gabriel Cruz Barreto y José Carlos Cataño (por los canarios).nm.